¿Quién no agradece un buen consejo? Después de atender con infinita paciencia, honda compasión y lujo de detalle, la menudencia, los santos y señas del desbarranco depresivo de su amigo, ella le dijo:
Querido: dimensiona, proporciona; extrae la mayor cantidad posible de drama a este asunto que a todas luces tiene remedio.
Y, si aún así insistes en aventarte por la ventana, ¡al menos ábrela antes de saltar!
6 Responses
No tienes idea el bien que me hace poderme reir tambien de mi humor depresivo! Gracias! jaja
¡Qué bonito blog todo él! Como un castillo de diferentes tipos de textos, muy bonitos, todo tan preciosamente organizado para que los curiosos podamos descubrir sus rincones. Un texto me ha llevado al otro, una sección a otra. Encontré varios textos en Facebook e Instagram y ahora heme aquí. ¡Qué buen descubrimiento! Adoré las minificciones, todas.
Muchas gracias Camila. Llegar a la mirada de un lector curioso como tú, es un oasis en el camino. Bienvenida y espero verte pronto por aquí.
Me pasé por las minificciones un rato, ¡qué agradable tarde pasé!
Gracias, Ángel, me alegras que pasees y disfrutes el blog. Estás siempre bienvenido en este espacio.
Bienvenido, Ángel!